LOS MUNDOS PARALELOS
En la cosmovisión indígena americana, la estructura del cosmos está compuesta por múltiples mundos paralelos, frecuentemente clasificados en tres: el supramundo y el inframundo, de ancestros y espíritus buenos y malos y el terrenal que es el mundo de en medio, en el que habitamos plantas, animales, minerales y nosotros, los seres humanos.
Muchos rituales y objetos promueven la comunicación entre estos mundos y mantienen el flujo de energía vital, el equilibrio dinámico de la naturaleza y la continuidad de la vida. Además, reflejan la estructura dual del sistema cósmico, dinamizado por sus fuerzas opuestas y complementarias como la noche y el día, lo masculino y femenino, la vida y la muerte.
Cuando las dos mitades se dividen se genera cuatripartición con lo cual se crean los cuatro puntos cardinales y el centro. Este esquema representa la geografía sagrada de los mundos paralelos.